Santiago Raigorodsky

En el Museo de Arte Contemporáneo de Santo Domingo

En la muestra “Antológica” el artista argentino-español Santiago Raigorodsky (1944) presenta mas de cincuenta obras de etapas, medios y técnicas diferentes, incluyendo 11 litografías y 7 dibujos en grafito sobre papel, exponen la diversidad de lenguajes, estilos y procesos creativos que signan la personalidad y trayectoria artística profesional de Raigorodsky, artista que durante mas de tres décadas ha estado desarrollando una intensa labor creativa y docente que le ha llevado a vivir y trabajar por largas temporadas en Brasil, Israel y España.
En los últimos años, Santiago Raigorodsky ejecuta una serie de pinturas abstractas definitivamente emblemáticas…En estas obras Raigorodsky parte de la naturaleza, de la materia visible para llegar a lo invisible. Partir de una concentración profunda de lo material, de lo natural, de la terrestridad, de la fisicidad de lo real, para hacernos partícipes, testigos y cómplices de la más pura abstracción y llegar a tocar los filamentos más sutiles de lo metamundano, de lo intemporal, de lo metafísico, de lo intangible
Los paradigmas que nutren tales obras son el color (como transparencia de la luz), la geometría como manifestación de la forma y la materia como fuente energética. Una plenitud de la forma subyace en las estructuras internas de las composiciones pictóricas de Santiago Raigorodsky. Su apuesta por los valores geométricos aporta un mensaje en estado puro, sin adornos, sin desviaciones, sin divagaciones ni estridencias. En ese sentido, podría decirse que la suya es una pintura desnuda, cuya sorprendente capacidad evocadora nos depara una sugestiva sensación de vínculo con las fuerzas telúricas y etéreas. Materializadas como impresiones o resonancias del paisaje en las que nos impactan sus elocuentes juegos de contrastes y tonalidades rojizas, azuladas, grisáceas, verdosas, plateadas, ocres y encaladas, estas pinturas activan también como espacios revitalizadores de la espiritualidad.


Amable López Meléndez
Curador del Museo de Arte Moderno
Santo Domingo, abril del 2005

Nace en Buenos Aires ( República Argentina), en Diciembre de 1944, donde reside hasta 1975 año en que se traslada a Brasil. Allí prosigue su actividad como artista plástico trabajando en diversas ciudades pero fundamentalmente en Rio de Janeiro y Curitiva.
En 1982 se traslada a Israel donde vive en la ciudad de Kfar Saba prosiguiendo con su actividad plástica y docente.
En la actualidad vive en la ciudad de Barcelona desde el año 1989, donde continúa con su incansable actividad como artísta.

Hace ya mucho tiempo que no me pregunto porque pinto. Para mí esto es tan natural, tan vital como respirar, comer, andar, hablar o cualquier otra cosa que nos es común a todas las personas. También , en algun momento (quizas esto me resulte mas actual) me he preguntado, y me preguntan, que es lo que pinto. Respuestas, seguramente, hay infinitas. Ilustres pensadores, filósofos, escritores, pintores, contadores de historias, han contribuído a explicar acerca del arte en todas sus manifestaciones y seguramente, allí podriamos encontrar inteligentes aunque nunca satisfactorias respuestas.
Hoy sé que jamás dejaré de pintar, y lo que me entusiasma de ello no es sólo aquello que se ve con los ojos.
Mi entusiasmo hoy, pasa por las histórias jamás contadas, por el recuerdo de los sueños, del perfume de la flor, de los pasos sin huellas, del color del paisaje durante el ocaso, del cristal empañado, de las presencias de lo ausente, del camino por andar, de la fuerza del mar, por todo aquello que no se contar.
Por eso pinto. Por eso trato de atrapar momentos, de darle color y forma a los sentimientos, por eso me emociono ante muchas cosas que son parte de la vida.
Me viene a la memoria un cuadro de Rothko y unas palabras de él "Una pintura no se basa en la experiencia, es una experiencia".

Santiago Raigorodsky. Marzo del 2006

Premios obtenidos entre otros:

2006 - Mención de honor ayuntamiento de Mocada i Reixac. Barcelona
1998 - Accesit VII Bienal de Martorell
1997 - Segundo premio Salón de Artes Plásticas de Centelles
1979 - Premio Adquisición. Salón Ferroviario - Río de Janeiro
1974 - Primer premio organización "ARO" - Buenos Aires
1974 - Primer premio, "Semana de la Botánica" - Buenos Aires
1973 - Mención "Sociedad Española" S.A de Areco – B. Aires
1971 - Primera mención "Centro de Comisarios Navales"

“De la exposición, aquello que primero se puede decir es que es decididamente abstracta. Las obras de Raigorodsky recrean un universo autónomo que no es otro que el que nace de la necesidad expresiva del artista; el color, su gran aliado y, al mismo tiempo, su gran preocupación, supone el material esencial a partir del cual este artista trabaja. No son obras delante de las cuales se haya de querer conceptualizar una idea, el mismo artista evita hacerlo y se limita a dejar que la pintura trace sus propios caminos.
Nos encontramos delante de una abstracción que podríamos calificar de musical. Pensar la música no hace otra cosa que empobrecerla. Su interés radica, precisamente en el hecho de tratarse de un lenguaje metalingüístico que apela, ni más, ni menos, que a nuestra sensibilidad; y es que si hay alguna cosa que demanda la pintura de Raigorodsky es sensibilidad”.

Así, vio y sintió el crítico de arte Eudald Camps, una de mis últimas exposiciones, ésta realizada en la ciudad de Gerona.

La pintura por la propia pintura, aunque la misma se orienta hacia la luz a través de transparencias de gran belleza en los colores, que evocan formas desde la abstracción. Santiago Raigorodsky (Buenos Aires, 1944) ha perfeccionado su lírica plástica y crea un mundo de ideas sobre el ser humano a través de las ideas que nacen en nosotros al relacionarnos con el entorno.
La abstracción de Raigorodsky es táctil, ya que nos relaciona con lo perceptible mediante los sentidos. Los colores de la luz nacen en el interior de cada cuadro, al igual que los sentimientos que expresa se originan en la mente humana. Pintura que se expresa por sí misma, dentro de las pautas de una lírica muy personal, sin dejar de tener amplia voluntad participativa. Recomiendo la visita.

Josep M. Cadena – El Periódico, Barcelona 1º de marzo del 2006