Vinko Hlebs: En memoria del pintor fallecido

Vinko Hlebs: En memoria del pintor fallecido

Olimpia Gaia Martinelli | 17 mar 2025 8 minutos de lectura 0 comentarios
 

La hija de Vinko Hlebš, Marijana Hlebš Radžo, respondió a las preguntas sobre él. El pintor falleció el 2 de julio de 2022 a consecuencia de un trágico accidente de tráfico en el que también falleció su esposa, Francka Hlebš. Era muy popular y respetado, habiendo realizado más de 90 exposiciones individuales y participado en más de 150 colectivas.

La hija de Vinko Hlebš, Marijana Hlebš Radžo, respondió a las preguntas sobre él. El pintor falleció el 2 de julio de 2022 a consecuencia de un trágico accidente de tráfico en el que también falleció su esposa, Francka Hlebš. Era muy popular y respetado, con más de 90 exposiciones individuales y más de 150 colectivas. Recibió numerosos premios por su obra artística y llevaba más de 50 años creando. Sus hijas, Marijana, Urška y Eva, se encargan ahora de su legado y de sus futuras exposiciones. Las respuestas se basaron en el conocimiento de la obra de su padre, sus entrevistas, un documental sobre él y críticas de arte.

¿Qué inspiró a Vinko a crear arte y convertirse en artista (eventos, sentimientos, experiencias...)?

Comenzó a dibujar y pintar a mediados de sus veinte años, animado por su hermano mayor, quien también le compró su primer equipo de pintura. Realizó su primera exposición individual a finales de los sesenta. Su carrera pictórica continuó evolucionando.

¿Cuál ha sido tu formación artística, tus técnicas y los temas con los que has experimentado hasta ahora?

Se formó en cursos de arte con los renombrados pintores académicos eslovenos Milan Batista y Stane Kregar. Su gran amigo y mentor fue también uno de los teóricos del arte eslovenos más importantes, Milan Butina. Al comienzo de su trayectoria creativa, se centró principalmente en bodegones y paisajes, derivados de la naturaleza, lo que indicaba lo que le interesaría e inspiraría como pintor a lo largo de su obra. En la transición de los años setenta a los ochenta, eligió decididamente la vida vegetal como su motivo central y mantuvo este enfoque temático durante las décadas siguientes, desarrollando un lenguaje artístico auténtico a través de la creación continua. Inicialmente pintando estrictamente realista, más tarde trascendió su pintura añadiendo un mensaje simbólico a imágenes de la naturaleza capturadas ópticamente. En sus últimos años, emergió un lenguaje temático ligeramente diferente, enfatizando la importancia de la creación y la mística de la vida en el cosmos. Así, amplió su espectro temático de la vida en la Tierra a la vida en el cosmos. Sus pinturas recientes introdujeron un nuevo elemento temático: los minerales. También prestó mucha atención a las representaciones de flores en tonos vibrantes y saturados de color, lo que indicaba la presencia del simbolismo del color.

¿Cuáles son los 3 aspectos que lo diferencian de otros artistas y hacen que su obra sea única?

Su rasgo distintivo eran los misteriosos fondos de color azul verdoso oscuro, que creaban una sensación de espacio infinito y trascendencia. Detalles realzados del mundo vegetal —plantas de pradera o cultivadas, flores, frutos, líquenes, musgos, diversos insectos—, estilizados en formas fantásticas, como si se separaran de su entorno natural y se capturaran en un instante fugaz. Funcionan como imágenes que, con formas claras y puras, se transforman en escenas enriquecidas que trascienden la realidad. La presencia de un simbolismo único, a veces obvio, a veces más sutil. En sus obras, las plantas sirven como metáfora de los humanos, ilustrando el ciclo vital humano desde el nacimiento y el crecimiento hasta la decadencia y la muerte.

¿De dónde vino su inspiración?

Se inspiraba en sus paseos por la naturaleza. A menudo bromeaba diciendo que la naturaleza era su inspiración y su mentora.

¿Cuál fue su enfoque artístico? ¿Qué visiones, sensaciones o sentimientos busca evocar en el espectador?

Con una deliberada elección de colores vivos e intensos, buscó no solo complacer y evocar placer estético, sino también resaltar la riqueza de las dimensiones metafóricas, simbólicas y expresivas. Su credo artístico reflejaba una reflexión personal sobre el mundo, caracterizada por una orientación humanista y principalmente positiva, ya que la mayoría de sus pinturas fueron concebidas con optimismo. Con una sensibilidad visual hacia la dinámica de la vida, planteó una serie de preguntas sobre la existencia humana, abordando las realidades en las que vivimos, sus obstáculos y ofreciendo constantemente nuevas posibilidades para comprender la naturaleza y el mundo. Por lo tanto, sus pinturas poseen una atmósfera espiritual especial, armonizando los colores para abarcar el ritmo de los mundos natural y cósmico y reflejando las expresiones artísticas personales del autor con significado simbólico.

Era conocido por no subtitular sus obras maestras, prefiriendo que los espectadores interpretaran las pinturas a su manera y tal vez vieran otros mensajes que surgían del subconsciente del pintor.

¿Cuál fue el proceso de creación de tus obras? ¿Espontáneo o con una larga preparación (técnica, inspiración en clásicos del arte u otros)?

Vinko se inspiraba en la naturaleza para sus creaciones. Solía bromear: «La naturaleza es mi mentora». Solía tumbarse en un prado y observar plantas y flores con una lupa durante horas, para luego, con paciencia, transferir estas imágenes ancladas al lienzo. Sus obras contenían simbolismo, por lo que siempre tenía un libro de "Diccionario de Símbolos" a su lado en el estudio. Luego, trasladaba estos símbolos al lienzo mediante sus interpretaciones artísticas. Además de pinceles y herramientas de pintura habituales, también usaba una lupa para ampliar los detalles del mundo vegetal.

¿Utilizaste alguna técnica de trabajo en particular? De ser así, ¿podrías explicarla?

Su técnica más habitual fue el óleo sobre lienzo, aunque también hay acuarelas en su colección.

¿Hay aspectos innovadores en tu trabajo? ¿Podrías decirnos cuáles?

Su riqueza de colores, formas y mundos demostró una fuerte voluntad artística y energía creativa, simbolizando el ciclo eterno: nacimiento, vida, muerte, sufrimiento y alegría. El sufrimiento es necesario para que florezca una nueva vida. Con su simbolismo visual, conectó el cielo y la tierra, este mundo y el más allá. Cada pintura es una imagen de vida, una imagen de fe y esperanza en la bondad.

¿Tuviste algún formato o medio con el que te sintieras más cómodo? Si es así, ¿por qué?

Es más reconocible por sus pinturas de gran formato, de 100 x 100 cm, ya que es precisamente en estos lienzos de mayor tamaño donde sus detalles y colores ampliados cobran protagonismo.

¿Dónde producías tus obras? ¿En casa, en un taller compartido o en su taller personal? Y en este espacio, ¿cómo organizaba su trabajo creativo?

Vinko creaba en su estudio, que también era su lugar favorito y donde su excepcional energía creativa aún se percibe. El estudio siempre estaba muy ordenado porque era una persona muy organizada. Disfrutaba dibujando de madrugada. No pasaba un día sin que, al menos, visitara el estudio. Siempre llevaba material de dibujo en sus viajes para poder crear sobre la marcha. Cuando llegaban visitas, les mostraba algunas de sus obras y su espacio de trabajo. Sus pinturas siempre le entusiasmaban. También compartía sus conocimientos como educador. Muchos estudiantes, tanto jóvenes como mayores, recibieron su formación.

¿Su trabajo lo llevó a viajar para conocer nuevos coleccionistas, asistir a ferias o exposiciones? De ser así, ¿qué le aporta?

Las exposiciones de Vinko no se limitaron a Eslovenia; expuso en Klagenfurt, Viena (Austria), Zagreb, Ludwig (Croacia), Ginebra (Suiza), Colonia (Alemania), Belgrado (Serbia) y muchas otras ciudades europeas. Cerca de 600 de sus pinturas se han exhibido en todo el mundo. Sus obras se pueden encontrar en Argentina, Austria, Italia, Alemania, Francia, Polonia, así como en toda Eslovenia y la antigua Yugoslavia. Le encantaba viajar por Italia y admirar las obras de los maestros del Renacimiento.

¿Cómo imaginabas la evolución de tu trabajo y carrera como artista en el futuro?

Lamentablemente, el pintor ya no está con nosotros, pero nosotras, sus tres hijas, somos quienes cuidamos su legado. Hasta la fecha, hemos realizado dos exposiciones conmemorativas en Eslovenia, con una asistencia muy positiva, en la capital, Liubliana, y en su ciudad natal, Tržič. Tenemos prevista otra exposición para este año. También estamos reforzando su presencia en redes sociales y presentando sus obras en la galería online Artmajeur. Hay un gran interés por sus obras.

¿Cuál es la temática, estilo o técnica de tu última producción artística?

En sus pinturas recientes, ha surgido un nuevo elemento temático: los minerales. Desde una perspectiva lejana de la tierra, descendió bajo la superficie terrestre y organizó los cristales que encontró en composiciones que semejaban flores. Representó formas florales con cristales, dotando así de vitalidad a la materia inanimada mediante imágenes orgánicas. Los minerales forman así pétalos en la parte superior de los tallos, que recuerdan a la hermosa floración de algas marinas o corales. También prestó gran atención a la representación de flores en tonos vibrantes y saturados, lo que sugiere la presencia de simbolismo cromático.

¿Nos puedes contar cuál fue la experiencia expositiva más importante de Vinko?

Sin duda, la exposición más impactante fue la de Viena, en la Kleine Galerie, Austria, en 1986, que tuvo una acogida excepcional tanto del público como de la crítica de arte. Tanto los medios de comunicación eslovenos como los austriacos informaron sobre la exposición.

Si Vinko hubiera podido crear una obra famosa en la historia del arte, ¿cuál habría elegido? ¿Y por qué?

Sin duda, habría elegido la creación de Adán en el techo de la Capilla Sixtina (Sacellum Sixtinum). Era un gran admirador del Renacimiento y de los maestros de la pintura al óleo. Le encantaba viajar a Florencia, Roma y el Vaticano, donde tuvo la oportunidad de admirar estas obras maestras en persona.

Si hubiera podido invitar a cenar a un artista famoso (vivo o muerto), ¿quién sería? ¿Cómo le sugerirías que pasara la velada?

Es bastante difícil elegir solo uno, así que mencionaré dos. Sin duda, Miguel Ángel, pues era su gran admirador, y más recientemente, Salvador Dalí. La velada estaría llena de risas, pues Vinko era conocido como un gran artista, y cada visita a su casa resonaba a carcajadas. Su esposa, siempre a su lado, se aseguraba de que la cena fuera estupenda y disfrutara con una buena copa de vino. La velada continuaba en el estudio de Vinko, donde siempre tenía invitados, participando en charlas sobre arte. Vinko exhibía sus obras y preguntaba a los maestros su opinión. La reunión seguramente se prolongaba hasta bien entrada la noche, ya que nunca se quedaban sin temas de conversación.

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