Qué le motivó a crear arte y convertirse en artista (acontecimientos, sentimientos, experiencias...)?
He tenido la suerte de pertenecer a una familia interesada en el arte y por tanto mi aproximación tuvo lugar de forma muy natural durante la infancia. El crear arte no lo veo como tanto como elección voluntaria, es más bien una necesidad vital, un mecanismo creativo que me permite exteriorizar mi parte inconsciente. Desde muy pequeño dediqué muchas horas a los juegos de construcción que unido a los intereses familiares creo que me han proporcionado la base que ahora me permite desarrollar mi trabajo. Los comienzos fueron espontáneos a través del diseño de joyas que terminó derivando en la aproximación a la escultura.
Como elemento de revelación, que podría asumir que inició mi interés por el trabajo escultórico, podría señalar la identificación de un elemento singular en una revista de decoración de interiores, cuando tenía veinte años. Ese elemento, que en aquel momento no sabía que era una escultura, estaba colocado a modo de cabecero de cama, era una barra metálica alargada y horizontal que en su parte central tenía unos bucles. Al cabo de un tiempo entre en una librería y por casualidad tenían una catálogo de un escultor español, uno de los más importantes de la segunda mitad del siglo XX, Martín Chirino. Comencé a ojear el catalogo y me fascinó, en una parte encontré la serie de piezas llamada Aerovoros, y aquí surgió el descubrimiento, la pieza que había visto meses antes en la revista y que se había quedado grabada en mis subconsciente era una de las des esta serie. No sé muy bien por qué me marché de la librería sin aquel libro, pero la imagen seguía ahí, pasado un tiempo lo compré. Por fortuna al cabo de los años puede conocer personalmente a Martín Chirino en su casa y visitar su taller.
Me gusta pensar que ese cúmulo de coincidencias fue el arranque de mi pretensión escultórica y que, de alguna forma, el cerebro va preparando el camino para el descubrimiento.
¿Cuál es su formación artística, las técnicas y los temas que ha experimentado hasta ahora?
Acudí durante un par de años a diferentes talleres de modelado y escultura, pero podría decir que en su mayoría es no reglada. Porque sobre este asunto creo que es importante destacar que, al menos en mi caso que trabajo con hierro, hay dos partes de la creación que se unen y separan que serían, parte puramente creativa del diseño, y la tarea de construcción, que es un trabajo artesanal. Estas dos visiones separadas pero dependientes necesitan de una formación diferente y específica.
La formación artística, que es la base para consolidar la parte creativa, la he desarrollado a través de ver cientos de exposiciones, he acudido a decenas de conferencias y he cursado asignaturas universitarias de arte contemporáneo y vanguardias. Sobre la formación artesanal he ido aprendiendo según necesitaba resolver problemas técnicos y he ido incorporando soluciones que facilitan y mejoran los resultados finales.
¿Cuáles son los 3 aspectos que le diferencian de otros artistas y que hacen que su obra sea única?
1.- Creación de elementos con alma: Mi pretensión artística y escultórica se centra en la creación de elementos con alma, aunque pueda parecer algo pretencioso, por tanto intento alejarme de la abstracción, dado que quiero dotar a las piezas de una componente orgánica. Deben ser elementos que parezcan auto generados, con una componente original y un cambio claro de visión pero que, de alguna forma, mantengan una parte reconocible que permite al espectador introducirse en la obra. Un referente para mí de este concepto serían: Brancusi, Isamu Noguchi, Henry Moore, Barabara Hepworth, Julio Gonzalez, Oteiza…
2.- Alejamiento de la abstracción pura: No confió en el juego artístico de la aleatoriedad y la abstracción pura y creo firmemente que no es posible que se produzca realmente, dado que intervienen dos factores que lo impiden. Por un lado el creador, que aunque pretenda hacer algo puramente abstracto tendrá dificultadas, porque su cerebro se forzará a ver patrones, formas, conceptos identificables, incluso en la mancha o en la forma más abstracta. Lo mismo le ocurre al espectador que, al aproximarse a la obra de forma consciente o inconsciente, tenderá a ver algo reconocible. Por tanto esta vía me no me interesa extrayendo de ella algunos elementos y desechando el resto.
3.- Devolución del carácter sagrado: La escultura en la antigüedad tuvo siempre una componente sagrada. Inicialmente se destinaba a elementos de adoración portables durante la prehistoria, después pasamos a dioses en sus templos o esculturas mitológicas en la antigua Grecia y Roma, pero siempre como elemento de adoración y reflejo de una verdad superior, siempre colocadas sobre un pedestal, de forma que quedan separadas del espectador y se colocan en otra dimensión. A finales del siglo XX se decide democratizar el arte y bajar las esculturas del pedestal, eliminarlo asumiendo que esto acercará la obra al espectador. El problema es que esa eliminación también coloca a la obra en la misma dimensión en la que está el espectador y por tanto le roba a la pieza su carácter misterioso y sagrado.
Podemos recordar que Brancusi fabricaba las peanas especialmente para cada obra, casi como otra escultura complementaria.
En este punto debo destacar también el arte africano, o lo que de el llego a los museos europeos a principios del siglo XX. Este interés lo extiendo a todo arte denominado como “primitivo”, que demuestra una y otra vez ser actual porque acude a lo más recóndito de nuestro subconsciente.
¿De dónde viene su inspiración?
La inspiración me viene del interés por todo lo que me rodea, puede ser pintura, escultura, música o cualquier rama del conocimiento. Surge de investigar y trabajar en torno a la creación escultórica.
¿Cuál es su enfoque artístico? ¿Qué visiones, sensaciones o sentimientos quiere evocar en el espectador?
Me gustaría que el espectador tuviera la intuición de que la escultura, de alguna forma, tiene su propia presencia, una esencia particular, que trasciende el objeto inanimado. Me interesa la idea de que todas las cosas tienen su alma.
¿Cuál es el proceso creativo de sus obras? ¿Espontáneo o con un largo proceso de preparación (técnica, inspiración en los clásicos del arte u otros)?
Mi proceso creativo toma dos líneas opuestas dependiendo de las condiciones previas. Si es un encargo que debe cumplir determinadas condiciones trabajo con esas premisas intentando llevarlas a mi lenguaje. En cambio si la creación es libre y sin supeditar a nada suelo usar un sistema casi de dibujo automático. Comienzo con unas líneas básicas hasta que encuentro alguna forma que me interesa, en ese momento me centro en ella y empiezo a hacer variaciones. El resultado son decenas de miles de bocetos de los que voy traspasando a escultura aquellos que en un momento dado me llaman la atención o que soy capaz de visualizar tridimensionalmente.
¿Utiliza alguna técnica de trabajo en particular? Si es así, ¿puede explicarla?
Mi trabajo se centra, casi en su totalidad, en la chapa de hierro cortada, curvada y soldada. Por tanto necesito un cuidadoso plantillado de las diferentes partes para que el resultado final se acerque lo más posible al boceto previo.
¿Hay algún aspecto innovador en su trabajo? ¿Puede decirnos cuáles son?
La única innovación que podría aportar sería una particular mirada, un acercamiento a la abstracción orgánica de mis piezas y, por otra parte, un trabajo con formas modulares. El reto de conseguir esa sensación orgánica partiendo de piezas iguales y geométricas me genera mucho interés.
¿Tiene algún formato o medio con el que se sienta más cómodo?
Como ya he comentado mi trabajo se centra en la chapa de hierro, si bien es cierto que de alguna forma me limita, dado que no puedo conseguir la suavidad de formas que se pueden lograr con el yeso por ejemplo, me aporta una nobleza en el manipulado y un acabado que creo que lo compensan.
¿Dónde produce su obra? ¿En casa, en un estudio compartido o en tu propio estudio? Y en este espacio, ¿cómo organiza su trabajo creativo?
Tengo el privilegio de tener un estudio propio en mi casa, en un edificio anexo.
¿Cómo cree que se desarrollará su trabajo y su carrera como artista en el futuro?
Si analizo mi obra creo que, aunque parece heterogénea, tiene un hilo conductor sólido que espero seguir evolucionando en los próximos años. Tengo el empeño continuo de mejorar mi faceta de artesano, intentando desarrollar piezas que hace años no hubiera abordado por su complejidad técnica.
¿Cuál es el tema, el estilo o la técnica de su última producción artística?
Durante una temporada he estado realizando cabezas humanas simplificadas, casi cubistas. La última pieza que he desarrollado, aparcando las cabezas, ha sido una obra de la serie Obosom. Llevo 10 años trabajando en esta serie de esculturas que se inspiran en las figuras femeninas con un trasfondo religioso, como una mezcla de vírgenes románicas cristianas y la escultura ritual africana, tamizado todo ello por unas líneas limpias y estilizadas.
¿Puede hablarnos de su experiencia más importante en una exposición?
He realizado más de 60 exposiciones en diferentes países europeos, tanto individuales como colectivas, todas ellas han tenido algo de especial.
Si pudiera crear una obra famosa de la historia del arte, ¿cuál elegiría? ¿Y por qué?
No me atrevería a pensar en crear esa escultura, dejémoslo que obra me parece la más inalcanzable, sin duda sería el David de Miguel Ángel, como diría Coleridge no es bella, es sublime.
Si pudiera invitar a un artista famoso (vivo o muerto) a cenar, ¿quién sería? ¿Cómo le sugerirías que pasara la noche con ellos?
No soy mitómano de los creadores, creo que la obra está por encima del artista y por tanto, a priori, no estaría demasiado interesado en una noche con ellos… pero si con su obra. Una noche increíble podría ser disfrutar de las obras de Brancusi o de Julio González, por poner dos ejemplos, en soledad… y poder tocarlas, claro. La parte táctil es muy importante para apreciar la escultura y los muesos nos la hurtan, por tanto creo que la única forma real de disfrutar el arte es compartir tu vida con él, tenerlo en tu casa, verlo todos los días, apreciar cada día un pequeño detalle, ver cómo cambia con la luz de cada estación, como si estuviera vivo.