En el vasto mundo de las técnicas artísticas, algunas parecen desafiar la rigidez de las categorías tradicionales, posicionándose con agilidad y fluidez a medio camino entre diferentes ámbitos creativos. Si tomamos por ejemplo la zona "límite", donde se unen la pintura y el dibujo, inmediatamente nos vienen a la mente las formas artísticas del rotulador, el pastel y el bolígrafo.
De hecho, la característica distintiva que une a las técnicas anteriores es precisamente la de mezclar elementos, tanto del dibujo como de la pintura, cada uno a su manera peculiar. El rotulador, con su fluidez y la posibilidad de crear líneas definidas y vibrantes, ofrece una gama cromática viva y una sensación de movimiento propia de la pintura. Los crayones, por otro lado, con su textura suave y su capacidad de mezclar colores directamente sobre la superficie, permiten al artista explorar la profundidad y las sombras, como en una pintura. Finalmente, el bolígrafo, con su precisión y talento para crear detalles finos, ofrece una experiencia similar al dibujo, pero en una gama más amplia de medios y con la capacidad de experimentar con diversas texturas y estilos "pictóricos".
Por ello, ahora viene bien explorar la historia y evolución de las técnicas artísticas en cuestión, destacando aquellos elementos que provienen, tanto del dibujo como de la pintura, colgando como modelos algunas obras de la colección de Artmajeur.
Obras de Artmajeur que incluyen marcador, pastel y bolígrafo
Marcadores y creatividad
Un marcador es una herramienta de escritura y dibujo que cuenta con una punta porosa que libera tinta sobre diversas superficies, como papel, plástico, vidrio y metal. Contiene su propia fuente de tinta dentro del cuerpo del bolígrafo y está disponible en varias formas y tamaños, lo que ofrece una amplia gama de posibilidades creativas.
Los rotuladores tienen una historia rica e interesante que se remonta a 1910, cuando Lee Newman patentó el primer modelo de rotulador. A lo largo del siglo XX, el marcador experimentó una evolución significativa, con hitos clave como la patente de Benjamin Paskach en 1926 para un "cepillo de fuente" y la introducción del marcador mágico por parte de Sidney Rosenthal en 1953. En 1962, Yukio Horie desarrolló el moderno marcador con punta de fibra. de Tokyo Papelería Company, presagiando una nueva era de expresión artística y escritura.
Los marcadores son herramientas esenciales en el arsenal de todo artista, ya que ofrecen una amplia gama de tamaños, formas y colores diseñados para permitir la experimentación y la libertad creativa. Esta variedad se debe en gran medida a la punta del instrumento, que puede ser fina para líneas precisas o ancha para rellenos más amplios. Además, muchos marcadores cuentan con tintas especiales, como las de base agua o pigmentos, destinadas nuevamente a proporcionar mayores posibilidades expresivas.
En referencia a su rico lenguaje, los marcadores se pueden emplear tanto en dibujos como en bocetos, ideales para crear contornos precisos, detalles intrincados y obras de arte de rápida ejecución. Además, en cuanto a coloración y relleno, esta herramienta permite colorear áreas grandes o pequeñas con una amplia gama de tonalidades disponibles. En particular, los marcadores también son adecuados para técnicas de medios mixtos, donde se utilizan junto con otros lenguajes artísticos para crear obras de arte complejas, en capas, únicas e innovadoras. Finalmente, en el mundo del arte callejero, los marcadores se utilizan predominantemente para crear graffitis y murales en paredes y superficies urbanas, convirtiéndolas en galerías de arte al aire libre.
Volviendo brevemente a la relación marcador-pintura: técnicamente, la presión y el ángulo correctos del marcador modulan la intensidad del color, permitiendo un sombreado gradual similar al logrado con acuarela o pintura acrílica. Además, los marcadores se pueden superponer o mezclar directamente sobre la superficie para crear nuevos tonos y efectos de fusión que añaden profundidad y dimensión a las obras de arte. Algunos artistas incluso utilizan técnicas como el puntillismo o la fusión con marcadores, aplicando pequeños puntos o líneas finas para crear texturas y matices. Este enfoque puede producir resultados similares a los de la pintura al óleo o acrílica, donde la superficie se construye gradualmente mediante una serie de pequeños toques o sombras.
Para concluir con algunos ejemplos notables de marcadores, a lo largo de los años, numerosos artistas han utilizado esta herramienta como medio de expresión para crear obras de arte icónicas, como las de Keith Haring, Banksy y Quentin Blake.
MADAME RÊVE (2022)Pintura de Jean-Humbert Savoldelli
¡JE L'AI ADOPTÉ! (2022)Pintura de Johanne Proulx
Explorando el potencial de los marcadores
Las obras de arte contemporáneas a menudo transmiten un diálogo visual entre técnicas tradicionales y expresiones artísticas modernas, y los artistas se aventuran en la exploración de nuevos medios y formas. Dos ejemplos sorprendentes de esta fusión entre pintura y uso de rotuladores se pueden encontrar en las obras "Madame rêve" de Jean-Humbert Savoldelli y "Je l'ai adopté!" de Johanne Proulx, ambos de 2022.
"Madame rêve" combina acrílico y rotuladores sobre lienzo y ejemplifica la transición del pintor del hiperrealismo y el Trompe-l'oeil a una expresión más libre y abstracta. El núcleo de la obra de arte presenta figuras humanas y escenarios pintados con una espátula, mientras que la ornamentación circundante, rica en motivos coloridos, está ejecutada con marcadores Posca y pintura acrílica. Este contraste visual no sólo acentúa la profundidad de la composición sino que también refleja el deseo de Savoldelli de evocar la fantasía y los sueños a través del arte. Su estilo se distingue por su rica coloración y la dinámica de las formas, a menudo realzadas por el uso de círculos y esferas para sugerir un cierto equilibrio visual.
"¡Je l'ai adopté!" por otro lado, presenta una narrativa visual más íntima, altamente introspectiva y espontánea. Proulx, una pintora canadiense, explora una relación bastante emocional y física con sus materiales, desde papel hecho a mano hasta superficies pintadas. La obra, que combina pintura y rotuladores, se caracteriza por gestos amplios y texturas pronunciadas que se manifiestan con naturalidad en el soporte. Por último, la combinación de colores vibrantes y la manipulación directa de materiales pretenden reflejar el enfoque personal de la artista, diseñado para transformar su arte en un texto biográfico.
Así, ambas obras se convierten en un manifiesto de cómo los marcadores, comúnmente asociados con bocetos o dibujos preliminares, también pueden alcanzar el estatus de un medio pictórico de pleno derecho, especialmente cuando se combinan con técnicas más tradicionales. De hecho, los dos artistas en cuestión han aprovechado su versatilidad para agregar detalles intrincados o crear contrastes de textura, ampliando así el rango expresivo de la pintura contemporánea.
Expresiones en colores pastel
El pastel es una herramienta artística utilizada para dibujar y pintar, caracterizada por colores sólidos hechos principalmente de pigmentos, tiza o una combinación de ambos, unidos por un aglutinante. Generalmente tiene forma de palitos, pero también se puede encontrar en forma de lápiz. Es conocido por su versatilidad y la capacidad de crear colores vibrantes y matices delicados.
El uso del pastel se remonta a muchos siglos atrás, con evidencia histórica que data del antiguo Egipto y el Imperio Romano. Sin embargo, el pastel tal como lo conocemos hoy tiene sus raíces en el siglo XV, cuando los artistas europeos comenzaron a utilizar pigmentos mezclados con tiza para crear colores densos y vivos. A lo largo de los siglos, el pastel ha seguido evolucionando, convirtiéndose en el medio favorito de muchos maestros debido a su facilidad de uso y su capacidad para crear obras de arte visualmente impactantes.
Pastel ofrece multitud de posibilidades técnicas, resultando ideal para delinear, detallar, composiciones complejas y bocetos rápidos. Gracias a su suave textura, los artistas pueden lograr líneas precisas, delicadas, simples y articuladas con facilidad, creando dibujos ricos en expresión y personalidad. Además, con una amplia gama de colores disponibles, los pasteles permiten a los artistas llenar áreas grandes o pequeñas con múltiples tonos vibrantes y saturados. Estos pueden superponerse o mezclarse directamente sobre la superficie de soporte, donde pueden originar tonos suaves y transiciones suaves entre colores. Los artistas también pueden mezclar colores directamente sobre la superficie, utilizando simplemente los dedos y herramientas especializadas.
Estas características son aprovechables en diversas formas de arte: en el dibujo y la pintura, ya sea aplicando en capas finas o gruesas la textura mate, así como en combinación con otras técnicas artísticas como la acuarela, la tinta o el temple.
El pastel puede considerarse un punto medio entre el dibujo y la pintura debido a su carácter híbrido y sus múltiples posibilidades de uso. Por un lado, el pastel ofrece la precisión y el control típicos del dibujo, permitiendo a los artistas crear líneas definidas, contornos detallados y bocetos rápidos. Por otro lado, gracias a su textura suave y su color tenue pero fuerte, el pastel se puede utilizar para crear pinturas ricas en matices y texturas, similares a las que se logran con la pintura.
Entre las famosas obras de arte creadas con pasteles, destacan obras maestras de artistas como Edgar Degas, Mary Cassatt y Henri de Toulouse-Lautrec. Degas, en particular, es conocido por sus magistrales pinturas y dibujos de bailarinas utilizando pasteles, capturando la gracia y el movimiento de los sujetos representados. Mary Cassatt utilizó el pastel para pintar retratos íntimos y delicados, mientras que Toulouse-Lautrec creó carteles e ilustraciones vibrantes, destinados a inmortalizar la vivacidad de la vida nocturna parisina.
¿DEL LIMONCELLO? NON JE NE CONNAIS PAS (2024)Pintura de G. Carta
Obras de arte creadas con pasteles
Las dos obras seleccionadas, "Le Ballet des Éclats" de Ivan Colas y "Du Limoncello? Non je ne connais pas" de G. Carta, ofrecen una visión íntima de la armonía lograda entre el pastel y la pintura, demostrando cómo estos medios pueden fusionarse para crear expresiones artísticas profundas y atractivas.
"Le Ballet des Éclats" de Ivan Colas, creado en 2023, explora la vibrante interacción entre la luz y el color sobre papel mediante el uso de pasteles, acrílicos, lápices y carboncillo. Cada cuadrado de la obra de arte representa una celebración de la vida, que pretende manifestarse mediante el uso de colores atrevidos y luminosos que parecen emerger de las grietas de la oscuridad. Como resultado, el pastel se convierte en un símbolo de cómo la naturaleza se presenta inesperadamente y la belleza triunfa a pesar de todas las adversidades. De hecho, "Le Ballet des Éclats" es efectivamente una invitación al espectador a reflexionar sobre la resiliencia y el renacimiento.
"Du Limoncello? Non je ne connais pas" de G. Carta, en cambio, refleja un enfoque diferente pero complementario. Utilizando pasteles al óleo sobre papel, el artista ha construido ricas texturas que capturan y reflejan la luz, dando a la obra una sensación de profundidad y complejidad. Este método, que requiere precaución porque el pastel al óleo no se seca por completo, realza la fluidez emocional de la obra de arte, donde cada trazo contribuye a contar historias de momentos humanos llenos de emoción, humanidad, compartir y esperanza.
Se hace evidente que estas dos obras pueden interpretarse como símbolos de la afinidad entre la pintura y el pastel, dos medios que, cuando se combinan, ofrecen una libertad expresiva amplificada y una fusión perfecta de texturas y colores. Esta sinergia no sólo capta la atención visual sino que también involucra emocionalmente e involucra directamente a los espectadores, transportándolos a una profunda experiencia artística.
Tinta e imaginación
El bolígrafo, a menudo llamado simplemente "biro", es una herramienta de escritura que tiene una pequeña bola giratoria en la punta, destinada a distribuir tinta mientras el cuerpo de plástico se desliza por la superficie. Este mecanismo permite una escritura suave y uniforme, lo que convierte a los bolígrafos en una opción popular tanto en el ámbito artístico como para diversas tareas de escritura cotidianas.
El origen del bolígrafo se remonta a finales del siglo XIX, aunque no fue hasta mediados del siglo XX cuando nació el bolígrafo moderno. El periodista húngaro László Bíró, junto con su hermano György Bíró, patentaron el primer diseño exitoso de bolígrafo en 1938. Este invento revolucionario reemplazó las sucias y poco confiables plumas estilográficas de la época y rápidamente ganó popularidad en todo el mundo.
Los bolígrafos están disponibles en varios colores y tamaños de punta, lo que ofrece versatilidad para diferentes tareas de escritura y dibujo. En el mundo del arte, los bolígrafos son valorados por su precisión y control, lo que permite a los artistas crear detalles intrincados y líneas finas. Sin embargo, los artistas experimentan con diferentes formas de usar el bolígrafo, usándolo también para crear sombreados, sombreados y efectos de textura únicos.
De manera más general, el bolígrafo se utiliza normalmente para realizar bocetos preliminares y trazar contornos precisos. Los artistas también utilizan técnicas de rayado cruzado y punteado para crear sombras y matices de grises. Estas técnicas permiten variaciones tonales y texturas realistas, añadiendo profundidad y volumen a los dibujos. Los bolígrafos también se utilizan para crear sombras, lo que permite efectos tridimensionales y da forma a la forma de los objetos dibujados. Este modo de ejecución requiere una mano firme y un control preciso de la presión sobre el lápiz para lograr transiciones suaves entre colores.
Entre los temas más populares creados con el bolígrafo se encuentran sin duda los retratos, ya que la precisión de la técnica permite capturar con precisión los rasgos faciales distintivos, desde las líneas faciales hasta los detalles de los ojos y los labios. Los bolígrafos también se utilizan comúnmente para representar paisajes urbanos y naturales, a menudo con la intención de representar dibujos detallados de edificios, calles, árboles y otras características del paisaje. Es precisamente la variedad de líneas y texturas que se pueden conseguir con el bolígrafo lo que permite captar la complejidad y profundidad de este último tema. Por último, en cuanto a otro género famoso en la historia del arte, el bolígrafo se utiliza a menudo para crear naturalezas muertas, representando objetos inanimados con contornos y detalles refinados, destinados a dar vida a composiciones equilibradas y realistas.
En cuanto a la asociación bolígrafo-pintura, en primer lugar, el bolígrafo se puede utilizar para crear obras de arte que presentan una variedad de estilos y enfoques, al igual que con la pintura. De hecho, los artistas pueden jugar con líneas, formas y sombras para crear efectos artísticos únicos, que van desde representaciones realistas hasta experimentación abstracta, tal como lo harían con pinceles y colores. Además, la naturaleza permanente de la tinta de bolígrafo puede llevar a los artistas a trabajar en capas, que recuerdan a la técnica pictórica de capas. Por último, el bolígrafo ofrece un mayor control en comparación con otras herramientas de dibujo; dicha precisión permite a los artistas capturar los matices y facetas de sus sujetos con precisión, creando obras de arte que pueden ser comparables a pinturas.
Concluyendo con ejemplos famosos de la técnica del bolígrafo, podemos mencionar algunos artistas conocidos que han contribuido significativamente a definir la estética y el potencial de este medio, como Juan Francisco Casas, Lennie Mace y el menos contemporáneo Alberto Giacometti.
VENECIA. GRAN CANAL (2022)Pintura de Maria Susarenko
DIBUJO ACADÉMICO. FANTASÍA (2022)Pintura de Marat Myrzakhmetov
El arte del bolígrafo
Las obras de Maria Susarenko y Marat Myrzakhmetov proporcionan un ejemplo intrigante de cómo el bolígrafo puede utilizarse no sólo como herramienta de escritura sino también como medio artístico de alto valor estético. Estos artistas demuestran cómo el bolígrafo puede coexistir armoniosamente con otras técnicas artísticas, creando composiciones visuales ricas y complejas.
"Venecia. Gran Canal" (2022) de Maria Susarenko, elaborado con una combinación de acrílico, bolígrafos de gel, marcadores y lápices sobre cartón, captura la esencia vibrante e histórica de Venecia. El artista utiliza cartón, un material menos popular y texturizado, para producir líneas fluidas y una mezcla de colores y sombras destinadas a reflejar el movimiento del agua y la compleja dinámica arquitectónica de la ciudad. Esto da como resultado una escena tan caótica como armoniosa, donde la técnica de técnicas mixtas permite a Susarenko agregar finos detalles destinados a enfatizar ciertos aspectos estructurales y luminosos de la composición, mostrando la versatilidad del bolígrafo para representar tanto arquitectura como elementos acuáticos.
"Dibujo académico. Fantasía" (2022) de Marat Myrzakhmetov adopta un enfoque más surrealista y simbólico. La obra, realizada principalmente con bolígrafo sobre papel, demuestra la idoneidad del medio para explorar meticulosamente formas orgánicas y geometrías precisas. De hecho, la composición "entrelazada" de Myrzakhmetov incluye elementos tanto naturales como artificiales, diseñados para encontrarse en una dimensión paralela donde crean un diálogo visual entre lo real y lo imaginario. En este contexto, el uso del bolígrafo es crucial para definir líneas precisas y agregar detalles que casi se mezclan, mostrando la capacidad de esta herramienta para evocar un rango emocional profundo y variado.
En última instancia, queda claro cómo las obras de Susarenko y Myrzakhmetov, a través de sus estilos únicos y elección de temas, resaltan la capacidad del bolígrafo para ser tan expresivo y versátil como las técnicas de pintura más tradicionales. Sus obras no sólo celebran las cualidades estéticas del medio artístico en cuestión, sino que también abren nuevas posibilidades para su aplicación en las artes visuales, desafiando las percepciones tradicionales y fomentando una nueva apertura hacia una experimentación creativa más innovadora.